En una nota publicada por Página 12 de Argentina, se demuestra lo que mismo que en casi todas las latitudes del mundo: Muchas personas, especialmente niños, niñas y adolescentes comparten via Internet información personal con personas que no conocen.
El riesgo menor es una cita a ciegas. Denuncias e investigaciones de acoso, estafas, producción de pornografía infantil, robos de identidad para cometer delitos, chantaje y hasta casos de explotación sexual y trata de personas que se inicia en un chat son investigados en todo el mundo.
La respuesta de los gobiernos, incluido Paraguay, es aun muy tibia. Generalmente hacen oídos sordos a la falta de capacidad y necesidad de especialización de las fuerzas encargadas de investigar este tipo de hechos, y se ocupan solamente de los delitos económicos. Como contrapartida abunda la persecución social demonizadora de Internet y promotora de violar el derecho a la privacidad de los niños, niñas y adolescentes, como excusa por no proveerles de las herramientas necesarias para usar de manera responsable Internet y las Tecnologías de Información y Comunicación.
Hasta el momento la Secretaría de la Niñez y la Adolescencia de Paraguay se mostró interesada en hacer algo, pero no mucho... quien esté interesado en conocer una propuesta visiten mi campaña
Imagen: Cobis
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